La tecnología avanza a pasos gigantescos, y hoy en día ya existe la posibilidad de poder enseñar y aprender a través de esta plataforma. En mi caso, de momento nunca he aprendido una lengua como tal a través de internet. Sin embargo, eso no quiere decir que no haga uso de la tecnología para formarme. He reforzado algunos aspectos de las lenguas que ya conocía con la ayuda de la red. Una manera ha sido formando parte de grupos ortografía y gramática en la red social Facebook. Otra vía que he usado para mejorar la comprensión y vocabulario es viendo vídeos, series y películas en inglés.
En mi opinión, no creo que sea posible aprender una lengua únicamente en línea. Aun así, pienso que es una manera muy cómoda, pues tú marcas tu propio ritmo de aprendizaje, tu horario y escoges el contexto en el que te quieres encontrar, por ejemplo, posiblemente te encuentres más cómodo estudiando en casa que en una biblioteca. Pero también tiene desventajas, ya que aprender digitalmente implica no tener al profesor presente, ni a los otros compañeros de clase, cosa que considero muy importante, aunque no esencial. En una clase presencia el alumno tiene la oportunidad de hacer tantas preguntas como quiera, y el profesor puede diseñar una respuesta específica para que ese alumno la comprenda.
En las clases se pueden dar dos tipos de contextos virtuales:
- Virtual Learning Environment (VLE). Este consiste en un mecanismo dado por las instituciones académicas, que ofrece al alumno una o varias plataformas virtuales a través de la cual el aprendiz completa su formación. Así pues, estas plataformas están estrictamente limitadas y gestionadas por la propia escuela. En mi caso, en la Universidad Pompeu Fabra tenemos una intranet llamada Campus Global, que incluye el Aula Global, donde cada estudiante encuentra las asignaturas que cursa y los profesores añaden documentos, vídeos o cualquier tipo de información digital para que sus alumnos tengan acceso a ella.
- Personal Learning Environment (PLE). Se trata de todos los recursos que ayudan al estudiante en su aprendizaje. Mi PLE está dividido el dos partes: el académico y el personal. El primero está formado por todos aquellos materiales (como libros, apuntes, fichas, diccionarios, Campus Global, Lignuee, Optimot, etc.) que uso para la Universidad. El personal incluye libros escogidos por mi, películas y series (la mayoría en versión original), vídeos de Youtube, prensa, blogs, revistas, etc.
Como todo viaje, este llega a su fin. Espero que mi blog os haya ayudado a reflexionar sobre el amplio mundo de la educación. Enseñar es todo un reto, y quien se atreva a enseñar nunca debería dejar de aprender. Hay que enseñar a los alumnos a que tengan sus propias herramientas para que puedan aprender por ellos mismos fuera de las aulas. Al menos este es mi pensamiento, y espero tener la oportunidad de ponerlo en práctica en breve.